martes, 19 de abril de 2011

Sanar en la metáfora

Nuestra manera de utilizar las palabras en cada momento, revela que nuestro discurso es subjetivo, ambiguo y poético, contrario a lo que comúnmente quisiéramos creer, o incluso contrario a lo que solemos llamar el bien hablar, el uso correcto del lenguaje, o hablar con propiedad. Es común escuchar el regaño de algún maestro, madre o padre de familia, cuando un niño, mucho más cuando una niña, pronuncia una mala palabra.  Sin bien es cierto que cierto apego a las reglas del lenguaje es requerido para la ampliar y profundizar nuestra comunicación, también es bien cierto que la elección de palabras y entonaciones, gestos, y todas aquellas formas de comunicación no verbal, pueden comunicar con mucha mayor precisión nuestro estado en un momento determinado, que el uso correcto del lenguaje.
Es decir, nuestro discurso está construido con los contenidos de nuestra vivencia emocional y psicológica, incluso existencial o espiritual,  en un determinado momento. Es ese estado íntimo, personal, que determina la elección de las palabras para expresar tal o cual idea, sentimiento, o proyecto.  
Por ejemplo, un joven relata una confrontación a golpes con su hermano menor. El mayor, al percibir el enojo de su hermano, un enojo que según su interpretación venía de tiempo atrás, le invitó a que le golpeara, el menor se negó, cuando después de la insistencia el mayor golpeó a su hermano en la cabeza, ese se fue encima, el mayor dejó que su hermano descargara su furia. Relata que después, en la calle, él le decía a su hermano “ya ven, para que me pongas hielo”. El menor accedió a poner hielo sobre los golpes que él mismo dio a su hermano. Ante esto, exclamé qué interesante, tú hermano te sanó tus heridas, y me pregunto si tu hermano necesitará que tú le sanes sus heridas.  Este joven, sin entrar en detalles, afirmó que definitivamente hay heridas por sanar. Días después, comentó que tuvo una conversación con su hermano en la que el tema principal era el de sanar las heridas mutuamente. Estas heridas no son las heridas físicas de una confrontación a golpes, nuestro joven no solamente inició un diálogo poético con su hermano, sino que utilizó esta metáfora de sanar las heridas, para tomar su lugar como hermano mayor, no como autoridad dictatorial, sino como un guía del hermano adolescente, marcó la pauta para una forma de relación en la que se admite el error del pasado, el dolor del prójimo, y la posibilidad de cambio, de reconciliación, de sanación.
Esta metáfora emergió en una conversación de manera espontánea, partiendo del contenido del relato, sin premeditación. De tal manera, la metáfora surge de la interacción, de la comunicación, de la relación, no se introduce al discurso, se encuentra. No sé cuáles son las heridas que estos hermanos buscan sanar, ignoro los detalles de su pasado, los datos anecdóticos, los traumas, no fueron necesarios explorarlos a profundidad, cada uno de ellos llegó a ellos a través de la metáfora. Lo importante, me parece, se encuentra en la posibilidad de re-encuentro que la metáfora refiere, sin que sea explicitado, de nueva cuenta, es innecesario – al menos en este caso, en este momento – enunciar los hechos concretos que demostrarían el cambio. 
En nuestra vida, cada día, en cada momento, nos relacionamos con nuestros seres queridos a través de metáforas, algunas de ellas son metáforas de destrucción, de fin, de agresión, otras son de encuentro, de sanación, de creación. Podemos buscar en nuestro pensamiento, en nuestras palabras,  éstas metáforas de sanación para llevar una vida plena.

lunes, 11 de abril de 2011

Violencia Contra las Mujeres

Escribir sobre la Violencia contra las Mujeres nos llevaría a recovecos tan amplios y profundos, como la vastedad de los océanos, lo cual nos tomará toda una vida explorar. Filosofía, Antropología, Psicología, Ciencias Sociales, en fin, una muy amplia gama de disciplinas se han dado a la tarea de estudiar el tema.

Hoy nos atañe un aspecto íntimo, personal, sobre la Violencia Contra las Mujeres;  la intervención y atención.  Escribo la palabra íntimo, haciendo referencia a lo personal del dolor que sienten las mujeres que viven en Situación de Violencia.  Mujeres cuya dignidad, mente, cuerpo, cuyo ser es mancillado de alguna u otra manera, por personas que dicen amarlas. Ellas, en el momento justo en que la violencia ocurre, en el acto mismo y en las horas, días, meses posteriores, necesitan de una ayuda práctica y efectiva, sensible a sus necesidades y a su situación, no solamente en los aspectos legales, económicos y médicos, sino también en los psicológicos, en los emocionales.

Escribí la palabra íntimo, pero la violencia contra las mujeres no ocurre únicamente en la intimidad del hogar,  también ocurre en los espacios públicos, en las escuelas, en los lugares de trabajo, en la comunidad. No solamente ocurre dentro del matrimonio o la familia, sucede también en el noviazgo, y en las relaciones de compañerismo escolar o laboral.

Esta violencia puede ser tan sutil, que en ocasiones se le pasa por alto. Por ejemplo, cuando se le dice a la niña que llena de alegre emoción tiene el fervor por golpear un balón, correr por el campo,  realizar faenas futboleras, y se le niega el campo por que es niña, luego viene la carrilla, el hostigamiento, el bullying, cuyo contenido es exclusivamente basado en el género, en ser niña. Esto, créase o no, sucede aquí en Tijuana, hoy,  en las primarias y secundarias.

Veamos otro ejemplo, una mujer de 50 años, que por tal o cual razón dejó su desarrollo profesional para enfocarse en la crianza de sus hijas e hijos. Quizá, se dijo en algún momento que era lo más práctico, quizá pensó que eso es lo que le corresponde hacer,  quizá alguien le dijo, o ella pensó; no puedo ser una mala madre. Después de todo - se dijo quizá-, que  él sí sabe sabe administrar el dinero. Entonces, el esposo controla el dinero, controla los ingresos, ella no tiene cuenta de banco, no tiene tarjetas,  si las cosas no se llevan en casa como él ha determinado puede enfadarse, enfurecer, se dice que siempre ha sido así, que hay que tenerle paciencia, que nada más cuando se emborracha se pone agresivo. Alguien por ahí le dice, así son los hombres, así es el matrimonio, hay que sacrificarse por los hijos, alguien le dice que después de todo no le pegan cómo a la vecina, que a pesar de todo nunca les hizo falta nada. Excepto que tampoco hubo un poco de más, o nunca hubo para el cuarto adicional, ya que el esposo, entre su seis de fin semana, su cerveza para dormir, las salidas con los amigos, se fue gastando los ingresos para la familia, la mujer.

Antes de llegar al golpe, podemos enunciar, traer a la luz, ejemplo tras ejemplo de los dolores de la traición, de la opresión, del control en la familia, de las vergüenzas en el trabajo o en la escuela, de las limitaciones de cumplir con estos estereotipos, en una palabra de sin ejercer la libertad.

Hay muchos recursos en la red para leer sobre este tema, aquí les comparto un "Test de violencia" que el INMUJERES tiene disponible en su portal, da click ** AQUÍ **, este test, puede darte una idea si vives violencia. Aunque el Test parece estar diseñado para mujeres y hombres en una relación de noviazgo, creo que puede dar una idea en cualquier otra relación. Por supuesto, es únicamente una guía, si tú o alguien a quién conoces se encuentra en una situación de violencia, no dudes en buscar ayuda.

Si tienes preguntas sobre este tema, o te gustaría recibir más información, escribe a terapia.navarro@gmail.com, o si te gustaría programar una consulta llama al (664)503-2142

Para lectura:
Instituto Nacional de las Mujeres

Instituto de la Mujer para el Estado de Baja California (Listado de Instituciones y Organizaciones Civíles)

Instituto Municipal de la Mujer (Tijuana, sitio en remodelación)

Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia (Archivo PDF)

Naciones Unidas. Violencia contra las mujeres.
http://www.cinu.mx/minisitio/unete/UNiTE_TheSituation_SP.pdf

Violencia Contra las Mujeres (en Wikipedia)

miércoles, 6 de abril de 2011

¿Qué es la Terapia?

   Es común escuchar a un familiar,  por ejemplo, decir que practicar un deporte, escuchar música o ir al cine, es su terapia, este sencillo ejemplo nos muestra que la palabra terapia forma parte de nuestra vida diaria.  Cada persona busca una actividad que le permita un tiempo y un espacio para el descanso, no solamente físico, sino también mental, una manera de recargar energías para regresar a las actividades y responsabilidades del diario vivir.  Algunas personas buscan ese espacio y ese momento con una amistad, a la cual le cuentan sus inquietudes, usualmente esperando un consejo, o quizá ese alguien que sabe escuchar y comprender, es decir alguien que le ayude a repensar las situaciones por las que atraviesa, para después poder abordar dichas situaciones de una manera más efectiva.
   Fuera del contexto de las amistades y de nuestras terapias personales, la palabra Terapia hace referencia a un tratamiento para aliviar una afección. En el portal de la Real Academia Española (www.rae.es) la palabra Terapia se define como Tratamiento, que a su vez se define como un Conjunto de medios que se emplean para curar o aliviar una enfermedad. En términos muy generales, podemos decir que la idea de una Terapia surge de la medicina.
    Por su parte, la Asociación Americana de Psicología (APA) en su portal de internet afirma que la terapia se refiere a un tratamiento por problemas psicológicos, en el que terapeutas y clientes trabajan juntos para entender los problemas e idear planes para arreglarlos. Según la APA, el enfoque generalmente se localiza en cambiar pensamientos, emociones o comportamientos inefectivos.
 Las connotaciones que hoy en día tiene el concepto de Terapia trascienden el campo de la medicina. Por ejemplo, el concepto también alude a una sanación del alma, tomando de diferentes tradiciones nativas, de las religiones occidentales y orientales, el concepto de sanar no se refiere a una enfermedad, dolor o herida localizada en una parte específica del cuerpo, sino por el contrario a una afección localizada en la subjetividad, es decir en lo íntimo, en lo indecible, en lo profundo de la emoción, en la memoria quizá, en nuestras relaciones de pareja, con nuestros hijos e hijas, con nuestra familia y parientes,  en nuestro ser. 
  Otras propuesta de terapia psicológica buscan integrar la visión de la sanación con la de la solución de problemas. Es decir,  esa sanación que buscamos va sucediendo en un proceso muy dinámico entre lograr cambios en el afuera; en nuestras relaciones, nuestro aspecto, dar solución a esos problemas de manera efectiva. Al mismo tiempo, se busca un cambio en nuestra experiencia de vida, en lograr una experiencia de libertad plena, de armonía, de paz.
  Existe una amplia variedad de maneras de llevar a cabo una terapia psicológica. Ya sea de manera individual, de pareja, o de grupo. Sin ahondar en detalles de lo que cada perspectiva de terapia busca, podríamos hablar de las terapias Psiconalíticas, las Cognitivo-Conductuales, las Humanistas-Existencialiastas, las Terapias Sistémicas, y recientemente se habla de las psicoterapias holísticas, que buscan la integración de las diferentes corrientes ya mencionadas. Cada perspectiva es muy efectiva para determinadas situaciones, por ejemplo, una situación de rezago escolar quizá sea más efectivo el abordaje Conductual, mientras que en una situación de divorcio una aproximación Humanista quizá sea la más adecuada, o bien para la resolución de conflictos de pareja o de familia, seguramente desde la Terapia Sistémica se obtendrían resultados rápidos y efectivos. 
  La elección de cuál es la perspectiva terapéutica para cada quién, va depender en gran medida de cómo se siente uno con tal o cual terapeuta. Si bien, la preparación y destreza de cada terapeuta es fundamental para que un tratamiento de resultados, también es importante el grado de comodidad personal que cada quien sienta con el o la terapeuta.

lunes, 4 de abril de 2011

Nueva Dirección

Con alegre gratitud inicio una nueva etapa en este devenir de ayuda. En adelante estaré dando consulta en un cálido espacio ubicado en calle 11va y Ocampo # 2011, Plaza la Once Local 13. Zona Centro.  (pueden ver el mapa dando click aquí). Eridú Méndez Bourne,  gran amiga y Neuropsicóloga, dedicada a la evaluación, diagnóstico y tratamiento neuropsicológico, tiene su práctica privada como profesional junto a  Cristina Raddatz LorcaTeraputa de Lenguaje y Maestra de Educación especial, ambas me han permitido compartir su espacio. Por lo que estoy muy contento, con una expectante emoción. Ellas atienden sobre todo a niñas, niños y adolescentes, por mi parte me enfoco en adolescentes y adultos, así que será un equipo muy interesante; una Lengua del Psiquis Neural, si me permite la expresión.


Cada una lleva su agenda en particular, sin embargo, si hay persona interesada en los servicios de mis compañeras con gusto les daré las referencias. Por mi parte para citas pueden contactarme en el correo terapia.navarro@gmail.com , pueden agregarme a su msn, y en el teléfono (664) 170.62.83